Espíritu Santo,
amor del Padre, y del Hijo,
inspírame siempre
lo que he de pensar,
lo que he de decir,
cómo lo he de decir,
lo que he de callar,
lo que he de escribir,
lo que debo hacer,
cómo debo actuar,
para gloria de Dios,
bien de las almas
y mi propia santificación.
Jesús, toda mi confianza está en ti.
Cardenal Jean Verdier
Publicado en: Oraciones con espíritu, VVAA, Ed. Fundación Maior, 2020 pp. 50-51.